Último viaje de Sánchez como presidente: acude a Francia como homenaje al exilio republicano

Cuatro décadas de democracia, primera vez que un presidente español visita la tumba de Manuel Azaña. Acompañado de sus familiares. Y con ellos, las ministras de Educación y Justicia, más simbolismo al reconocimiento al presidente de la República. Segunda parada, la tumba de Antonio Machado. Homenaje a los 450.000 republicanos españoles exiliados hace 80 años. La visita la han querido empañar los independentistas catalanes para reivindicar su república rupturista.

"España tendría que haberles pedido perdón mucho antes. Lo hace hoy, a deshora, pero lo hace con el orgullo de recuperarles para siempre", decía el presidente del Gobierno. Y con ellos, al resto de los que se vieron forzados a huir. "No quiero llenar el exilio de romanticismo ni de épica. El exilio es abominable siempre", apuntaba Pedro Sánchez.

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