El presidente de Ryanair asegura que su compañía aspira a superar a Iberia

En rueda de prensa, O'Leary manifestó que España sigue siendo una apuesta decidida de la aerolínea y destacó que mientras las otras compañías que operan en el país "han perdido pasajeros", Ryanair "está creciendo".

La epidemia de gripe porcina no le importa mucho porque "no tiene por qué afectar a los aeropuertos europeos", ni a los vuelos de Ryanair, y añadió que a su juicio se está explotando el "temor a la epidemia por parte de los políticos para tapar otras situaciones como es el caso de la crisis económica".

Para O'Leary es "absurdo" ver a la gente con máscaras en los aeropuertos europeos y no cree que se deba cancelar ningún vuelo de los que hay diariamente entre Europa y México.

Respecto al anuncio recientemente hecho por la compañía de que estaban planteándose la posibilidad de cobrar dos asientos a los obesos, el presidente de Ryanair dijo que "lo estamos estudiando", y añadió que no cree que sea una medida discriminatoria y que no "va en contra de la ley" que se pueda pesar a las personas antes de tomar un vuelo.

Pese a que contempla la posibilidad de cerrar el primer trimestre del año con una "leve pérdida", O'Leary cree que al final del ejercicio obtendrá buenos resultados, cerrando el 2009 con 67 millones de pasajeros transportados.

Las nuevas rutas que va a cubrir Ryanair desde Madrid son Almeria, Bolonia, Granada, Londres Gat y Malta; mientras que desde Alicante se podrá viajar a Bolonia, Fez, Gdansk, Lille, Haugesund, Marrakech y Santander.

Por último, el presidente de Ryanair justificó el abandono por parte de la compañía de las operaciones en los aeropuertos de Fuerteventura y Valencia por las "malas gestiones" de las autoridades de turismo de los respectivos lugares.

En el caso de Valencia se refirió a un concurso "público" que "ha sido secreto", ya que a Ryanair no le llegó la convocatoria, y que de esta forma fue ganado por Air Nostrum, "una línea aérea que cada vez transporta menos viajeros" y a quien le han dado 16 millones de euros.

En el caso de Fuerteventura, lo atribuyó a un incumplimiento de contrato por parte de las autoridades de la isla y del aeropuerto, dado que "cuando no se cumplen los términos de un contrato hay que irse".

No obstante, dejó entrever que está abierto a nuevas negociaciones y que si éstas son satisfactorias se podía solucionar el asunto, porque "sería bueno para nosotros y sobre todo para el turismo en España".