De cara a la Navidad, muchas ciudades refuerzan su seguridad en las zonas más vulnerables. En Barcelona, después del terrible atentado y de que la Sagrada Familia estuviera entre los objetivos de los terroristas han colocado ya los primeros maceteros. El Ayuntamiento parte de que el riesgo cero no existe, pero pretenden evitar que se repita un ataque. No obstante, estos maceteros, que no están collados al suelo y pesan 1.000 kilos, son provisionales.