La Comunidad Valenciana clama por una financiación autonómica "justa" en una marea multitudinaria

Una multitudinaria manifestación recorre este sábado el centro de Valencia para mostrar la unidad de la sociedad en torno a una financiación justa para la Comunidad Valenciana, un clamor al que se han unido miles de personas junto a partidos, sindicatos, patronal y entidades sociales. La protesta transcurre sin incidentes y sin banderas ni consignas para evitar "cualquier sesgo político".

Los organizadores --los sindicatos UGT-PV y CCOO PV junto a la patronal autonómica CEV, con el apoyo de PSPV, Compromís y Podemos-- quieren que esta cita sea "histórica" y no sea vista como un "ejercicio de victimismo", para que "el lunes, todos los grupos políticos se sienten a negociar" sobre el reparto de fondos.

La marcha ha arrancado con dos grandes pancartas de cabecera sin siglas de sindicatos y partidos, ambas bajo el lema 'El poble valencià exigeix finançament just' ('El pueblo valenciano exige una financiación justa', en español) y llevadas por los principales representantes de los organizadores. Le siguen otras cinco pancartas de plataformas de dependencia, enseñanza pública, ONG, juventud y sanidad pública.

La comitiva continúa con los manifestantes de los principales partidos con representación en la Comunidad Valenciana --PSPV, Compromís y Podemos--. Ciudadanos también apoya la marcha y el PP no se ha sumado al entender que la financiación se reclama en las instituciones y no en la calle.

A nivel institucional, se ha sumado todo el Consejo en bloque, diputados de las Cortes Valencianas y representantes provinciales y municipales. Todos marchan con el objetivo de lanzar una llamada a que la sociedad valenciana se haga oír "con una sola voz" para acabar con la "discriminación" que ha padecido con todos los sistemas de financiación autonómicos, como recoge el manifiesto conjunto.

Los manifestantes han partido pasadas las 18 horas de la calle Guillem de Castro de Valencia y continúan su recorrido por el centro de la capital a través del Paseo de la Pechina y la calle Blanqueries, hasta finalizar en las Torres de Serrano con la lectura del discurso unitario.

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