La colaboración ciudadana ha dado sus frutos y gracias a la difusión de la voz del hombre se le ha podido identificar. Tiene 66 años y 30 antecedentes por robos violentos. Llamó desde una cabina alertando de que dos ancianos estaban encerrados en una vivienda y en un garaje de Santander. Cuando llegaron los agentes de Policía al lugar detallado por informante, encontraron a un octogenario maniatado y muerto por asfixia.