A medianoche, una chica denunció a los agentes que realizaban funciones de seguridad en la fiesta, que le habían robado el móvil, por lo que la policía inició una búsqueda en la zona.
La policía detectó una persona que, ante su presencia, huyó, y tras una breve persecución consiguieron pararlo y registrarlo, para encontrar los 27 móviles robados esa misma noche.
