El Gobierno espera ampliar en 134 examinadores la plantilla de la DGT hasta finales de 2018

En concreto, el organismo que dirige Gregorio Serrano tiene previsto un aumento de 32 profesionales el próximo mes de abril --que han realizado el curso de examinador entre enero y marzo de este año--. Se trata de una convocatoria que se ha realizado, tal y como anunció el director de la DGT en sede parlamentaria, sobre personal militar y la promoción interna dentro de la DGT de funcionarios que no eran examinadores.

Tráfico volverá a convocar un curso para acceder a este puesto a "personal de nuevo ingreso", que se impartirá entre los meses de abril y junio. Las previsiones en este caso es de incluir a 70 nuevos profesionales en el mes de julio, al inicio de la 'temporada alta' de los exámenes de conducir. Los militares y funcionarios de otros ministerios tendrán una nueva oportunidad antes de que acabe el año, con un curso que comenzará en septiembre y que, según la DGT, permitirá añadir a la plantilla otra treintena de examinadores en diciembre.

Según explica el Ejecutivo en su respuesta, recogida por Europa Press, con estas cifras previstas, a finales de 2018 "estarán prácticamente cubiertas las vacantes de examinadores de las jefaturas provinciales de España. Aún así, ha precisado que es imposible determinar la distribución de estos 154 puestos porque depende su destino "de las posibles jubilaciones, de los concursos de traslados y de las peticiones de los propios funcionarios".

"Por tanto, a finales de 2018 la plantilla de examinadores será suficiente en todas y cada una de las jefaturas de Tráfico como para llevar a cabo con normalidad la actividad de los exámenes para la obtención del permiso", ha advertido.

COMPROMISO DE LA OPOSICIÓN PARA LOS PGE

La cuestión planteada por el partido socialista hace referencia a la huelga de cinco meses convocada por la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra) --entre julio y diciembre del año pasado-- por la que estos profesionales reivindicaban un aumento de 250 euros en el complemento específico salarial. Uno de los objetivos de esta petición, según argumentó la asociación convocante Asextra, era motivar con una subida de sueldo a funcionarios de la DGT a ejercer como examinadores. El PSOE defendía en el Congreso que responder a esta petición no supondría a las arcas públicas más de 2,5 millones de euros al año.

Finalmente, Asextra decidió terminar con la situación tras reunirse con los partidos de la oposición en la Cámara Baja. Todos ellos firmaron un compromiso con el colectivo para llevar una enmienda conjunta a los Presupuestos Generales del Estado para 2018, incluyendo esta partida de más de dos millones de euros.

Como consecuencia de la huelga, según las cifras de Asextra, unas 170.000 personas se quedaron a la espera de realizar la prueba para conseguir el carné de conducir. Los números facilitados sobre estos paros también incluyen el cirre de 130 autoescuelas y 80 millones de euros que ha dejado de ingresar el sector.