Las llamas que afectan a las localidades alicantinas de Jávea y Benitachell han obligado ya a desalojar a más de mil cuatrocientos vecinos de una veintena de urbanizaciones. Algunos de ellos tienen miedo a perder sus casas pero otros ya las han perdido. Ahora, lo que más preocupa es el parque Natural, amenazado por las llamas.