La religiosa María Rosario Ríos, primera mujer presidenta de la Conferencia Española de Religiosos

Ríos será la primera presidenta de este organismo --que representa a más de 35.000 religiosas y 10.000 religiosos-- desde que en 1992 hombres y mujeres se unieran en CONFER. Ocupará este cargo temporalmente, hasta que se celebre la próxima Asamblea General de CONFER en noviembre de 2016, cuando se elegirá al nuevo presidente. De las Heras espera que se elija a una mujer y anima a las religiosas a estar disponibles a esta tarea en la "dinámica" del Papa Francisco.

Precisamente, según ha indicado el hasta ahora presidente de la CONFER, estaban organizando para el próximo 23 de abril una jornada para debatir sobre el papel de la mujer en la Iglesia. Además, en CONFER está estipulado que cuando la presidencia es asumida por un hombre, la vicepresidencia deberá estar ocupada por una mujer y viceversa.

"Las mujeres en la Iglesia aportamos vida, palabra, a veces menuda y no alta, pero mucha palabra, y creo que en la CONFER también hay mujeres que están aportando mucho. Seguimos caminando en la reflexión sobre qué supone el papel de la mujer en la Iglesia de modo más consciente", ha subrayado.

Tras el "susto" inicial del encargo, Ríos lo ha aceptado con "gratitud y gratuidad". "Dios nos sorprende y nos lleva más allá de lo que pensábamos. Todo es para el bien de los que aman a Dios. Esto me lleva a la gratitud y a la gratuidad, a poner todo lo que pueda ante una situación que no esperaba", ha subrayado este jueves durante una rueda de prensa en la sede de la CONFER, con motivo del nombramiento de De las Heras como nuevo obispo de Mondoñedo-Ferrol.

La religiosa, que quiere conjugar la presidencia de CONFER con su cargo como superiora provincial en la Orden de la Compañía de María, ha mostrado toda su confianza en las posibilidades de la CONFER, donde ha asegurado que hay "mucha vida entregada". "La vida religiosa es vida bien viva en España", ha remarcado.

Además, Ríos se enfrenta a su nuevo cargo sin miedo ante la interlocución con otros cargos eclesiales ocupados principalmente por hombres. "No tengo temor, el camino hecho desde CONFER en relación a la Conferencia Episcopal, a los obispos, va siendo un camino de diálogo. Somos personas que queremos trabajar juntas para empujar el evangelio. Puede haber (dificultades), pero no es de los miedos que me entran al asumir temporalmente la presidencia", ha precisado.