Obligaba a adolescentes robar joyas a las madres para revenderlas
EUROPA PRESS
25/06/201316:58 h.El joven de 21 años acusado de obligar a ocho adolescentes a robar joyas de oro a sus madres y obligarles a dárselas si no querían recibir palizas ha negado este martes en el juicio con jurado popular que ha empezado en la Audiencia de Barcelona que hubiera amenazado a nadie, y ha asegurado que eran los mismos adolescentes los que le daban las joyas para que él las vendiera, ya que era el único mayor de edad.
En su declaración como acusado, Yassin M. --que se enfrenta a una pena de cárcel de 32 años por cometer ocho delitos de amenazas--, ha explicado que en el momento de los hechos él sólo tenía 18 años, su madre estaba en el hospital y tenía dificultades económicas, por lo que aceptó vender las joyas por encargo de los adolescentes a cambio de una comisión.
"Los menores venían con joyas y me decían que yo se las vendiera", ha afirmado, y ha dicho que los adolescentes del Instituto Pla de les Moreres de Vilanova del Camí (Barcelona) contactaron con él de octubre a diciembre de 2010 porque querían dinero para comprarse marihuana.
Además, ha argumentado que sólo tenía contacto con tres de las víctimas, y que a las otras cinco que han interpuesto denuncia "ni las conocía", además de afirmar rotundamente que él no conoce a ninguna banda latina, por lo que no puede haber amenazado con llamar a los 'latin kings'.
Yassin M., que ha contestado a las preguntas de la fiscal y a las de su defensa, también ha declarado que un padre lo llamó cuando se enteró de que su hijo le había dado las joyas, y que él mismo lo acompañó al establecimiento donde las había vendido para recuperarlas, ya que el padre decía que su hijo estaba loco.
TEMOR A LAS REPRESALIAS
Dos de los adolescentes supuestamente amenazados han declarado en el juicio que tuvieron "miedo" si no entregaban las joyas de oro al acusado y a su compañero --ya condenado por un juzgado de menores--, aunque Yassin M. nunca los amenazó directamente.
"¿Personalmente? No. A mí me contaron que me había amenazado, pero directamente a mi no", ha reconocido Marcos B., que ha explicado que le entregó varios collares y anillos de su madre porque pensaba que eran peligrosos y le pegarían.
Cristian D., de 17 años, que también ha declarado como testigo, ha afirmado que era una amenaza directa hacia dos amigos suyos, pero como él y otros les habían acompañado "era una amenaza hacia todos".
"Éramos pequeños. Teníamos 14 ó 15 años. Y cuando viene un chaval más grande, te asusta", ha dicho después de explicar que le habían dicho que si no entregaban el oro a Yassin M. o a su compañero le iban a pegar y a llamar a un grupo de 'latin kings'.
MADRES PREOCUPADAS
Dos de las madres que han declarado este martes en el juicio como testigos han explicado que preguntaron a sus hijos si pasaba alguna cosa porque los veían "muy preocupados" e inquietos, lo que no era normal.
Según ha explicado Mari Carmen F. --la madre de Cristian D.--, su hijo no se lo quería contar, pero se enteró a través de la madre de Marcos B., que había visto una conversación de Facebook en la que su hijo le explicaba lo que estaba pasando a una amiga.
A raíz de esta conversación, las dos madre se dirigieron a los Mossos d'Esquadra, que realizaron un seguimiento de los menores hasta que se produjo la reunión entre el acusado, su compañero y los adolescentes, en la que les tenían que entregar las joyas.
En este momento, los Mossos detuvieron a Yassin M. y se inició una investigación, tras la que se descubrieron cinco posibles amenazas más a menores que, del mismo modo, habían entregado joyas de oro por temor a recibir palizas.
A través de esta técnica, la fiscal considera que el acusado llegó a conseguir gran cantidad de joyas, que vendió por más de 6.300 euros en establecimientos de compra de oro en Igualada (Barcelona).