Protección Civil da por estabilizada la situación en las zonas de Huesca y Lérida afectadas por las inundaciones

Además, la dirección general de Protección Civil y Emergencias del ministerio del Interior se mantiene en contacto permanente con las autoridades autonómicas y las correspondientes Delegaciones del Gobierno.

En concreto, en el caso de Huesca, indica que la situación es estable y tiende a mejorar lentamente. Las personas que habían sido evacuadas en Benasque y Castejón de Sos han regresado a sus domicilios o se encuentran en casas de amigos o familiares.

En el caso de Benasque, se ha habilitado un paso para vehículos todoterreno para poder acceder a esta localidad y la Unidad Militar de Emergencias (UME) y los servicios de emergencia ya han conseguido llegar. En esta zona, la UME está interviniendo con 63 efectivos, 24 vehículos, 2 embarcaciones y 1 helicóptero, según especifica Protección Civil.

En Lérida, indica que continúan los ríos crecidos en las cuencas de los ríos Garona, Noguera de Cardós y Noguera Pallaresa, aunque los caudales van remitiendo lentamente. Del Valle de Arán han sido evacuadas algunas personas y, ante los cortes en el suministro eléctrico, Endesa, con el apoyo de la Unidad Militar de Emergencias y un helicóptero de gran capacidad, está trasladando generadores eléctricos para intentar paliar la situación.

Por otro lado, para este miércoles, se prevén precipitaciones en el interior de Asturias, Cantabria, Vizcaya y norte de Burgos, donde podrán alcanzar hasta 40 l/m2 en 12 horas. También se esperan tormentas en la provincia de Castellón.

Por todo ello, Protección Civil recomienda a los ciudadanos mantenerse informados en todo momento y seguir las recomendaciones que se vayan indicando, además de prestar especial atención a las normas preventivas de cada comunidad autónoma.

Así, ante la crecida de ríos, pide no entrar con el vehículo en áreas inundadas, circular preferentemente por carreteras principales y autopistas; mientras que ante las lluvias persistentes aconseja extremar las precauciones y no detenerse en zonas donde pueda discurrir gran cantidad de agua.

Ante el riesgo de tormentas, indica que en los núcleos urbanos también hay peligro de caída de rayos, por lo que es conveniente colocarse cerca de los edificios para protegerse y ante el riesgo de inundaciones, conviene retirar del exterior de la vivienda aquellos objetos que puedan ser arrastrados por el agua, entre otras recomendaciones.