Sociedades médicas recuerdan que no hay evidencias que cuestionen la seguridad de la vacuna frente al papilomavirus

Así, se han manifestado 15 asociaciones médicas y científicas, tras el reciente fallecimiento de una joven asturiana, acaecida después de haber sido vacunada frente al VPH, y que está siendo investigado por las Autoridades Sanitarias del Principado de Asturias y por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).

"Después de más de 120 millones de dosis de vacunas del VPH distribuidas en todo el mundo, ningún acontecimiento grave acaecido en un individuo vacunado ha sido relacionado causalmente con la vacunación, incluidos los casos de fallecimiento que inevitablemente ocurren también entre los adolescentes, tanto vacunados como no vacunados", advierten.

Para normalizar la situación, recuerdan que los casos de muerte asociados causalmente con cualquier tipo de vacuna son "extremadamente raros", y, concretamente, en lo que respecta a las vacunas aprobadas contra el VPH destacan que las reacciones adversas más frecuentemente registradas son molestias locales en el lugar de inyección y/o un ligero síndrome seudo-gripal, "siempre leves y de corta duración", en general se trata de "reacciones adversas habituales después de la administración de cualquier vacuna".

No obstante, "en medicina el riesgo cero no existe", ya que, recuerdan, "cualquier intervención médica está sometida a la potencial aparición de reacciones adversas". En cualquier caso, en lo referente al balance beneficio/ riesgo de la vacunación VPH "todas las informaciones procedentes de fuentes científicas coinciden en afirmar que los beneficios superan muy ampliamente a los riesgos", añaden.

Las sociedades médicas hacen un recuento de las organizaciones internacionales reguladoras que confían en su uso, entre las que destacan el Grupo de Expertos en Estrategias de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Alianza Internacional para la Inmunización y Vacunación (GAVI), que al igual que otros grupos de trabajo independientes coinciden en recomendar en los programas preventivos de Salud Pública la vacunación frente al VPH como una actuación preventiva primaria frente a un conjunto de cánceres, fundamentalmente los cuello de útero, pero también de vulva, vagina, pene y ano.

"En ningún caso -ninguno- ningún investigador, ningún clínico, ningún representante de ninguna Agencia Reguladora planteó la retirada de la vacunación VPH de la cartera asistencial; más bien al contrario se discutieron nuevos escenarios de indicación y aplicación", afirman tajantemente.

LA RETIRADA "CARECE DE BASE CIENTÍFICA"

En consecuencia a todo lo expuesto, las propuestas de retirar la vacunación VPH de los calendarios de vacunación españoles, tal y como recomendaba el pasado sábado el diputado de IU por Asturias en el Congreso de los Diputados, Gaspar Llamazares, "carecen de base científica y son anacrónicas".

Asimismo, añaden desconocer "a qué 'Comunidad Científica' se alude en algunas propuestas recientemente escuchadas, ni cuál es la información en que se sustentan, contraria a la interpretación de la Comunidad Científica mundial responsable de más de treinta años de investigación".

Por tanto, y en consecuencia, reclaman a los representantes políticos electos "un razonamiento riguroso y veraz a la hora de hacer declaraciones y propuestas", de modo que no provoquen "confusión de interpretaciones médicas y sanitarias con declaraciones emocionales carentes de fundamentos". Y, con el objetivo de evitar esta situación, recuerdan que están disposición de los representantes políticos, así como de la sociedad civil, para proporcionar y aclarar información en torno a esta y otras vacunas.

De este modo se han manifestado en un comunicado la Asociación de Microbiología y Salud; la Asociación Española de Coloproctología; la Asociación Española de Patología Cervical y Colposcopia; la Asociación Española de Pediatría; la Asociación Española de Urología; la Asociación Española de Vacunología; la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia; la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene y la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria.

Además, lo rubrican la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia; la Sociedad Española de Oncología Médica; la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Patología Cérvico-Facial; y la Sociedad Española de Quimioterapia, y que cuenta con la adhesión del Servicio de Epidemiología del Institut Català d'Oncologìa y del Observatorio Español de Vacunas.