La Unión Europea desembolsa unos 9.600 millones de euros al año en la lucha contra las especies exóticas invasoras

Un reciente análisis del impacto económico de 125 Especies Exóticas Invasoras (EEI) en Europa estima que el coste real derivado de los daños y la lucha contra las mismas asciende a 9.600 millones de euros al año para la Unión Europea.

No obstante, el impacto económico potencial es muy superior, elevándose a 12.700 millones de euros al año (aproximadamente unos 24.000 euros por minuto). Esta cifra, según señalan expertos, debe considerarse una subestima de la realidad ya que está extrapolada sólo de un limitado número de EEI.

Éstas, entre otras muchas cuestiones, están siendo abordadas por más de 350 investigadores, empresas y administraciones, procedentes de más de 10 países (Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Turquía, Canadá, Estado Unidos, Chile, Colombia y otros) que se dan cita en Pontevedra en un congreso para escuchar a expertos mundiales, entablar relaciones y hacer conocer sus servicios en el ámbito internacional.

El programa de la 'La Semana de las invasiones biológicas' cuenta con la presencia de conferenciantes de prestigio mundial y representantes de sectores y agentes clave hacen de este evento un foro de referencia internacional.

Según ha manifestado Laura Capdevila-Argüelles y Bernardo Zilletti, organizadores de la Semana, la propia esencia y la transversalidad del tema abordado y la necesidad de hacer frente a un problema que afecta gravemente al medio ambiente, a la economía y a la sanidad, "se evidencia en la determinación de la comunidad científica de responder a la necesidad global de hacer frente a la creciente amenaza de las especies exóticas invasoras".

El perfil de los participantes en este evento es de lo más variado. Así, hay científicos de instituciones académicas, educativas o centros de investigación --biología, ecología, veterinaria, agrícolas y otros--, además de instituciones, asociaciones científicas, administraciones con competencia en medio ambiente, agricultura, industria turismo y comercio y sanidad.

A ello se suman funcionarios de aduanas o con competencias de protección del medio ambiente, y empresas grandes y medianas del sector medioambiental o de sectores productivos como energía hidroeléctrica, abastecimiento de agua, sector forestal, viveristas y comercio de animales.

CAMBIO GLOBAL

En la inauguración de esta Semana las Especies Exóticas Invasoras se ha puesto de manifiesto que son consideradas como "uno de los cinco factores principales de cambio global de los ecosistemas" por la Evaluación del Ecosistema del Milenio. Y la preocupación por sus impactos "se ha convertido en uno de los temas centrales de debate político y científico", ha resaltado.

Para hacer frente a este problema muchos países están desarrollando herramientas estratégicas y tácticas y, entre ellos España ha apostado, según han señalado, a través de la LEY 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, por la prevención y control de las EEI mediante la elaboración de una estrategia y de un catálogo nacional.

Los datos científicos apuntan a que el creciente ritmo de las invasiones biológicas "incrementará el riesgo de extinción de especies nativas, disrupción de hábitats, pérdida de funcionalidad de ecosistemas y homogenización de la diversidad biológica".

No obstante, los especialistas coinciden en que pese al gasto realizado en diferentes países, las medidas aplicadas hasta el presente no han dado los resultados esperados dejando patente carencias y lagunas que necesitan ser colmadas (protocolos contrastados de prevención y manejo, listados de especies, información sobre las características de las EEI y los hábitats más susceptibles de invasión y otros) con el conocimiento científico.

Entre otros problemas, las invasiones biológicas acarrean también importantes perjuicios económicos derivados de la pérdida de funciones del capital natural (función soporte para la vida) y por consecuencia de las funciones para los humanos o, desde una perspectiva meramente utilitarista, de los valores de uso de los ecosistemas.