En Leganés y Mondragón no quieren ser Manu. Porque no confían en que tengan un Antonio que les guarde un décimo. Así que, como el año pasado vieron cómo sus vecinos celebraban el Gordo de Navidad, no quieren que esto se repita sin ser protagonistas. Por eso, las administraciones número 8 de Leganés y número 2 de Mondragón están más animadas que de costumbre y han aumentado sus ventas.