Ciudadanos, mecenas de la Ciencia y la Educación

La falta de financiación ahoga la Ciencia y los investigadores se buscan, literalmente, la vida. Los que forman el laboratorio de Neurovilorogía, del Departamento de Biología Molecular de la Universidad Autónoma de Madrid, lanzan un SOS desesperado. Necesitan dinero, 10.000 euros, para mantener activo el laboratorio y a quienes hacen que funcione. Y acuden al crowdfunding, a la financiación en masa que, en los tiempos que corren, está ayudando a no pocas causas.

A partir de aportaciones de 5 euros, (www.salvemoslainvestigación.org) cualquiera puede convertirse en un mecenas de la investigación. El laboratorio de Neurovirología, estudia el comportamiento del virus herpes simple en enfermedades como el Alzheimer y la esclerosis múltiple. Es un laboratorio pequeño, que publica en revistas científicas, lo que acredita internacionalmente su trabajo. Sin financiación, cerrará su actividad a final de año. Y excepto su director, José Antonio López, el único fijo, los investigadores, Raquel y Antonio, se irán a casa.

Maestros, pedagogos, estudiantes, voluntarios para ayudar a niños de familias cuyas condiciones económicas ponen en peligro su futuro educativo. En Málaga la asociación Antana, imparte cuatro horas a la semana clases de apoyo a niños de los barrios del Perchel y la Trinidad. Una oportunidad que los escolares aprovechas. Pasan del suspenso y la regañina, al aprobado, incluso notable y el buen comportamiento. Tienen lista de espera, pero no dinero. A partir de marzo, no podrán pagar la luz del local prestado donde se dan las clases.