El hundimiento del Prestige ha supuesto un cambio radical contra la contaminación

Así lo indicaron los capitanes de la Marina Mercante Rodolfo Oval y Javier Sáez, el primero de los cuales indicó que cuando se produjo el hundimiento del citado monocasco, que estaba cargado con 77.033 toneladas de fueloil, se compró mucho material de lucha contra la contaminación que luego sirvió para dotar las bases estratégicas.

Esas bases estratégicas de salvamento y lucha contra la contaminación están en A Coruña, Cartagena, Castellón, Santander, Sevilla y Tenerife, y desde ellas se presta el apoyo de infraestructura logística y de provisión de equipos humanos y materiales a las operaciones especiales que requieren capacidad adicional a la de los veintiún centros de coordinación de Salvamento Marítimo y de las unidades aéreas y marítimas.

Javier Sáez reconoció que de producirse otra situación como la del "Prestige" ningún centro del mundo está preparado para solventar por sí solo los problemas.

En el centro ubicado en la capital tinerfeña, que ocupa una nave de 4.000 metros cuadrados cedida por un periodo de 30 años por la Autoridad Portuaria, trabajan seis personas que se dedican al mantenimiento de los equipos para tenerlos preparados en caso de que sea preciso actuar.

En cuanto a los equipos de los que se dispone, Javier Sáez explicó que los hay de cuatro tipos, cuales son barreras de contención, equipos para recogida de hidrocarburos del mar (skimmers), tanques de almacenamiento y bombas de achique, además de equipos para intervención en actividades subacuáticas.

Las barreras se pueden desplegar tanto desde barcos como desde tierra y hay diversas variedades.

En el centro de Tenerife se dispone de 460 metros de barrera selladora, así como de 2.300 de barrera portuaria, 6.900 de costera, 1.100 de oceánica, 6.000 de barreras absorbentes y una barrera cerco, y entre todas suman 16.760 metros.

También hay en este centro varios tipos de skimmers para recogida de hidrocarburos del mar, como son tres de vertedero, dos de cepillos y tres de discos.

En cuanto a las bombas de achique hay dos hidráulicas, 9 neumáticas y dos eléctricas, y además se dispone de unidades de potencia hidráulicas.

El personal está formado por dos técnicos superiores de operaciones especiales, un mecánico-jefe de equipo, y tres operarios, todos con conocimientos y experiencia en lucha anti contaminación.

Rodolfo Oval comentó que aunque el centro esté bien dotado siempre hay cosas por hacer para mantener y mejorar los medios existentes.

Además, en la actualidad se trabaja para incrementar los medios en operaciones submarinas, ya que cuando un barco se hunde, como ocurrió hace dos veranos en Ibiza, la labor anticontaminación hay que desarrollarla en el fondo marino.

Las contaminaciones que se han producido en Canarias desde que está en funcionamiento este centro, en enero de 2009, han sido pequeñas y su personal ha participado en emergencias que se han producido fuera del Archipiélago canario en apoyo al personal de otras bases estratégicas.

Explicaron los técnicos de Operaciones Especiales que la mayoría de las contaminaciones menores surgen por fallos en cargas y descargas de buques, aunque las más importantes en cuanto a cantidad derramada suelen acaecer por colisiones, varadas o embarrancadas derivadas de la pérdida de propulsión del buque o temporales.

La base estratégica de salvamento y lucha contra la contaminación de Tenerife está bien situada por su proximidad a la refinería de Cepsa, si bien ésta tiene sus propios medios para actuar en caso de que haya un fallo en las cargas o descargas.

La detección de la contaminación se lleva a cabo desde los aviones de Salvamento Marítimo, que están equipados con sensores para detectar manchas, y desde un satélite de la Agencia Europea de Seguridad Marítima.

Rubén Darío García León