Javier Calvo subió al escenario de los Premios Feroz para hacer historia. Lo hizo del brazo de su pareja, Javier Ambrossi, codirector y coguionista de 'La llamada', para agradecerle a todo el mundo el apoyo que había recibido su película. Pero sobre todo, para lanzar al mundo un precioso mensaje de autoaceptación.