Recupera a su perrita un mes después tras haber ofrecido una recompensa económica

Una mujer se ponía en contacto con Jésica, la joven que llevaba un mes buscando a su perra en Argentina, gracias al anuncio que observó en los medios de comunicación locales. La chica ofrecía 30.000 pesos argentinos (unos 600 € al cambio) a quien localizase a su mascota perdida. De esta forma, la joven conseguía reencontrarse con su perrita de nombre China.

Tras conocer la noticia, la joven acompañada de su novio acudió a una comisaría de Policía para denunciar lo ocurrido. "En un momento pensé que no la quería dar o que me iban a robar. Uno piensa cualquier cosa o lo peor. En la comisaría me dijeron que no podían acompañarme. Yo llevaba la plata, iba con mi novio y una amiga. Pero cuando llegamos, había un policía en una garita: le conté la situación y me ayudó. En ese momento, vi a una mujer trayendo en los brazos a un perrito. Me puse a gritar y a llorar. Ella me reconoció… Se me hizo eterna la espera", ha señalado Jésica.

La mujer que encontró a la perrita de raza que intentó morderla, ya que probablemente la habrían lanzado desde un coche. Su propia dueña había recorrido ese barrio y había repartido folletos de búsqueda, sin éxito. La dueña del animal se plantea la posibilidad de que la mujer que la recogió se había encariñado con la perra pero terminó ante la presión social del caso.

Reclamó el dinero

La mujer que localizó y cuidó de la pequeña China exigió el dinero que ofrecía la joven por la recompensa. Alegó que "se le estaba cayendo el techo de la casa y que necesitaba el dinero". "Parecía una buena mujer. Por eso se la di directamente, ni siquiera me la pidió cuando nos encontramos, solo se la di", confirmaba Jésica.

¡China ya está en casa!

Jésica y China se encontraban después de estar separadas un mes entero. "No bajen los brazos nunca, hay que seguir siempre y hacerle caso a lo que uno siente" es uno de los mensajes esperanzadores que mandaba la propietaria del animal animando a otros usuarios a no perder la ilusión por reencontrarse con sus animales extraviados.

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