La justicia admite a trámite la demanda de Telecinco contra La Sexta

Según valora la Administración de Justicia, “el vídeo incide de lleno en una actividad concurrencial, atendido que actora y demandada son empresas que gestionan el servicio público de la televisión, y que los actos examinados pueden ser calificados de denigración de un competidor, ya que su finalidad primordial no es el ejercicio del derecho a la libertad de expresión y del derecho a comunicar y recibir libremente información con la correspondiente creación de un estado de opinión, sino que trata de influir en el mercado y en la decisión de los consumidores, en este televidentes, a la hora de elegir el canal de televisión que van a ver.

De la visión del contenido del scketch se desprende una valoración subjetiva altamente despreciativa de los contenidos de programas de Telecinco , sorprendiendo a los telespectadores casi desde el principio al fin de la pequeña interpretación con una serie de afirmaciones directas que ni en la forma ni en el fondo se pueden ver habitualmente en la televisión para referirse a otros programas de televisión, ni que tampoco aparecen justificadas en el texto del scketch, pero lo que sí es cierto es que provocan una lesión a la reputación o desprestigio de un competidor en el mercado televisión independientemente de que en este caso no se concrete en perjuicios materiales concretos como una disminución de la audiencia o de la publicidad, pero que trata de inducir la autonomía de decisión del consumidor en su vertiente de telespectador para que a la vista de esas afirmaciones no vea la cadena a que se refiere y que por lo tanto entra de lleno en el tipo de riesgo previsto en el artículo 5 de la Ley de Competencia Desleal”.

Esta es la segunda vez que la justicia falla a favor de Telecinco ante sus demandas contra La Sexta , tras la sentencia que desde septiembre de 2008 le impide utilizar imágenes de Telecinco en sus programas.