"¿Dónde están los agentes?, ¿están heridos?"

Se necesita empatía, serenidad y un tono de voz lo más neutro y calmado posible. Los operadores telefónicos del 112 reciben formación psicológica para saber gestionar llamadas de personas que están alteradas. En el caso de Ismael Rodríguez se nota en su forma de hablar que está bloqueado, por eso es importante que quien le responda le de tranquilidad y le hable con frases cortas. El operador no debe juzgar ni presionar al interlocutor.