McGregor va al Vaticano a bautizar a su hijo y acaba agrediendo a un hombre en un hotel

Conor McGregor sigue siendo noticia por episodios que se escapan de las artes marciales mixtas (MMA). El luchador ha vuelto a protagonizar un escándalo tras agredir físicamente, durante un evento en un hotel de Roma, al DJ Francesco Facchinetti. Hasta el momento, el ex campeón de UFC no se ha pronunciado sobre el episodio que podría traerle un grave conflicto judicial.

El irlandés de 33 años habría viajado al Vaticano para bautizar a su hijo pequeño, Rian, sin embargo, aprovechando su estadía allí, participó de un evento en el hotel St Regis, en Roma, Italia, donde se produciría la presunta agresión al famoso DJ.

Durante la noche del sábado, según Facchinetti, McGregor y él estuvieron juntos más de dos horas, divirtiéndose y hablando, sin embargo, el DJ ha declarado que en un momento "sin motivo" el luchador decidió atacarlo. “El muy famoso McGregor me dio un puñetazo en la boca, me rompió la nariz frente a diez testigos, sus amigos y sus guardaespaldas. Podría haberme callado y no decirle nada a nadie, pero como estoy aquí para contárselo, debo decir que esa persona es realmente violenta y peligrosa“, ha sentenciado en sus redes sociales.

El italiano mostró una herida en su labio y anunció que demandará a McGregor: "Lo recibimos como un héroe y en cambio es solo un matón de la peor clase... qué decepción... lo siento por él, lo tiene todo pero no tiene nada... Hay que detenerlo porque es peligroso para los demás. Ahora entiendo por qué tenía 20 guardaespaldas. No para defenderlo de los demás, sino para defender a otros de él".

La pareja del DJ, Wilma Faissol, ha corroborado los hechos: "De la nada, le lanzó un puñetazo a la cara de Francesco. Nos estaba invitando a otra fiesta. Francesco dijo: 'Está bien, vámonos' y lo golpeó. Faissol se quedó entonces en shock y pensó que se trataba de una broma planeada entre ambos, pero no fue así. "Francesco voló hacia atrás, cayó sobre la mesa y luego al suelo. Lo primero que me vino a la mente fue ‘¿estamos bromeando? ¿Es un espectáculo? Luego me quedé paralizada. Me di la vuelta y vi que sus amigos lo sostenían contra la pared porque quería seguir golpeando a Francesco. Luego se lo llevaron".

No es la primera vez que McGregor se comporta de esta manera. El año pasado fue acusado en Córcega de agresión sexual y exhibicionismo, y en 2019 atacó a un hombre en un bar irlandés porque éste se había negado a tomar un whisky que el peleador había comprado.