Un mecanismo detecta en 60 min hasta diez tipos de alergia a antibióticos distintos

Valiéndose de una ligera muestra de sangre, un equipo de especialistas ha logrado determinar un total de diez alergias a antibióticos distintas previamente a su diagnóstico médico. Dada la serie de pruebas cutáneas invasivas que implica comprobar este proceso al uso común, el conjunto de autores del nuevo experimento se propuso dar con una técnica menos agresiva que fuera "más ágil, sensible y no tan dolorosa para el paciente".

El resultado del proyecto europeo Cobiophad ha sido elaborar un mecanismo de bajo coste y alta sensibilidad que permite detectar de forma no invasiva y con una cantidad de sangre muy pequeña, alergias a antibióticos como la amoxicilina o la penicilina en menos de una hora.

Procedimiento

A través de un disco compacto que incluye un disco microfluídico se insertan las tomas de sangre realizadas. Una vez completado este proceso, un lector de discos y un software se encarga de procesar el ensayo y determinar un resultado al equipo de expertos.

La grandeza de esta ejecución es detectar tempranamente alergias a distintos antibióticos betalactámicos de gran potencia como la amoxicilina, la penicilina y ácido clavulánico entre otros.

Según uno de los técnicos el proceso es "muy sencillo". En primer lugar se carga una muestra en el disco para después insertarla en el lector. De ahí se obtiene el dato que mostrará a los médicos si ese paciente posee algún tipo de resistencia a los antibióticos examinados o no. "Todo ello en menos de una hora", ha señalado Ángel Maquieira, investigador del Instituto Interuniversitario de Reconocimiento Molecular y Desarrollo Tecnológico (IDM) en la UPV.

La seguridad, rapidez y menor coste son los valores principales que ha proporcionado este nuevo hallazgo científico, reduciendo además las molestias y riesgos para los pacientes. "En el momento en que el paciente viene a la consulta, con una pequeñísima muestra de sangre -25 microlitros- podemos saber si el paciente es alérgico o no", destaca Ethel Ibáñez, alergóloga del Hospital y miembro del equipo de Cobiophad.

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