Los menores captados por las mafias atemorizan a los vecinos del Raval con sus robos y peleas

Pillados con las manos en la masa. Su modus operandi es siempre el mismo: persiguen a turistas por la calle y les roban móviles, aparatos electrónicos y carteras para luego venderlos. Los ladrones son menores que viven en la calle pero no actúan solos. Detrás tienen una mafia que hace dos décadas que está instalada en el barrio del Raval. Las peleas y las amenazas son constantes en esta zona entre miembros de la mafia pero también con los vecinos. Por eso, el vecindario ha decidido plantarles cara.

Sin embargo, luego vienen las represalias y los vecinos viven atemorizados y hasta les da miedo salir a la calle. La Guardia Urbana ha aumentado su presencia en varias calles pero cuando la policía se va vuelven los enfrentamientos. Un conflicto que les tiene en pie de guerra. Por eso organizan caceroladas de protesta y la próxima semana se reúnen el Ayuntamiento, la Conselleria de Interior, los Mossos d'Esquadra y los vecinos para abordar el problema de seguridad que se vive en el barrio.

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