La nueva normativa de circular a 90 km/h afectará a 10.000 kilómetros de carreteras en España

La Dirección General de Tráfico (DGT) lo lleva anunciando desde el día 4 de enero y, finalmente será este martes 29 de enero cuando entre en vigor la nueva normativa, que modifica el artículo 48 del Reglamento General de Circulación, e impone un límite de velocidad en carreteras convencionales de 90 km/h. Los cambios de este límite de velocidad afectarán a unos 10.000 kilómetros de vías.

Fue una medida aprobada por el Consejo de Ministros el pasado 28 de diciembre y publicada por el Boletín Oficial del Estado (BOE) un día después. Su activación no ha llegado hasta ahora para que, de esta forma, hubiera tiempo para poder adaptar las señales de tráfico.

El objetivo principar de esta modificación en el artículo 48 del Reglamento General de Circulación busca reducir los accidentes en carreteras y cumplir con lo establecido en la estrategia de Seguridad Vial 2011-2020 de bajar de 37 la tasa de fallecidos en accidente de tráfico por millón de habitantes, que en 2017 fue de 39.

Los países de la Unión Europea con menores tasas de fallecidos por millón de habitantes en accidente de tráfico tienen, según datos del Ministerio de Interior, un diferencial de límite de velocidad entre vehículos ligeros y pesados, en carreteras convencionales, que oscila entre 0 y 10 km/h.

Con esta nueva medida, ya no habrá un límite de velocidad en función de si la vía disponía o no de metro y medio de arcén practicable, sino que se aplicará un tope general de 90 km/h. También supone reducir la diferencia de velocidad entre vehículos de transporte de viajeros y mercancías respecto de los turismos.

Los camiones, por su parte, deberán circular a una velocidad de 80 km/h, como en la mayoría de los países europeos. Mientras que los autobuses tendrán el límite en los 90 km/h, debido a la baja siniestralidad continuada de este tipo de vehículos, que en el caso de España tiene un ratio de fallecidos/tipo de vehículo (autobús) un 40% menor con respecto al ratio total de la UE.

Los límites de velocidad que ahora se modifican se fijaron a principios de los años 80 del siglo pasado, cuando la red viaria española no tenía casi kilómetros de vías de alta capacidad, situación completamente distinta a la actual.

La bajada de velocidad es una de las medidas 'estrella' del director general de Tráfico, Pere Navarro, y del ministro del Interior, Fernando Grtande-Marlaska. Durante los seis meses del Ejecutivo socialista, ambos se han mostrado en numerosas ocasiones a favor de rebajar la velocidad en este tipo de carreteras, donde tienen lugar en torno al 75% de los accidentes con víctimas. Además, la velocidad inadecuada es la causa principal en el 20% de los casos.

Para informar a los ciudadanos sobre la nueva norma, la DGT lanzó el pasado 4 de enero una campaña informativa de cuatro vídeos con el eslogan 'Menos velocidad, más vidas en la carretera. Mejor más despacio', que está siendo divulgada a través de las redes sociales.