Un nuevo barrio late en Nueva York

Mientras la mayoría pensaba que Nueva York lo tenía todo hubo quien vio un vacío, faltaba algo. Era 2005, cuando la ciudad peleaba por los Juegos Olímpicos de 2012, esos que luego se llevó la ciudad de Londres. De aquella tormenta de ideas, de futuros proyectos, nació un nuevo barrio con Michael Bloomberg como gran promotor. Levantado de la nada al ladito del río Hudson. Su nombre: Hudson Yards. Con apartamentos de lujo en grandes rascacielos, la monumental escultura “The Vessel”, un colegio, parques, mucha tienda y restaurantes. Algunos con sabor español que encontramos en el espacio “Little Spain”.

La guinda al nuevo rinconcito de la Gran Manzana, al oeste de Manhattan, se pone hoy con 'The Shed', en la que se han invertido unos 187 millones de euros. Un centro de arte único en el mundo, de los arquitectos Elizabeth Diller y David Rockwell, que abraza todas las disciplinas artísticas. Una pieza increíblemente versátil, nacida para acoger igual de bien una exposición de arte que clases gratuitas de danza o una discoteca. Un edificio que fascina, sobre todo, por esas grandes ruedas ferroviarias, que le permiten crecer casi el doble para dar cobijo una obra de teatro o un concierto pero que vuelve a recogerse para no estorbar, para ceder ese espacio a la gente.