La pista de Pablo, el desaparecido en Badajoz, se pierde a las 02:00, cuando iba a por un taxi
Pablo Sierra estuvo con amigos en el centro de Badajoz hasta que se marchó para volver a la residencia universitaria
Tras el hallazgo del móvil de Pablo Sierra, se paraliza el dispositivo de búsqueda
La incertidumbre de no saber nada de Pablo Sierra “es terrible”
Casi una semana después de la desaparición de Pablo Sierra, el joven universitario de 21 años al que se vio por última vez el pasado jueves cuando salió con amigos por el centro de Badajoz. Su familia sigue sin tener noticias de él e insiste en que no se fue voluntariamente.
El dispositivo de búsqueda de Pablo Sierra sigue suspendido a la espera de encontrar nuevas pistas. Lo último que sabemos es que iba a coger un taxi a las dos de la madrugada para regresar a su residencia, según informa El Español. Recorrió parte del camino con un amigo que desconoce si llegó a subir o no al vehículo.
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Aunque hay otra versión y es que Pablo Sierra cogió un autobús. De haberlo hecho tendría que haber sido uno de la línea 9. Los investigadores ya han rastreado las cámaras de esa línea y de las zonas por las que el joven se movió supuestamente esa noche.
El móvil de Pablo Sierra, clave en la investigación
La única certeza es que su móvil fue hallado en la ribera del río Guadiana, muy alejado del lugar en el que se le vio por última vez y de la residencia universitaria. De hecho está a unos siete kilómetros en sentido contrario.
Los investigadores están centrados en la información que pudieran extraer de su móvil para saber qué hizo Pablo Sierra en las horas previas a su desaparición.
Pablo Sierra, un estudiante de medicina de 21 años
Quienes conocen a Pablo Sierra dicen que no se iría por voluntad propia. De hecho, su familia asegura que tenía pensado pasar el puente de diciembre con sus padres y hermanos.
Fueron sus hermanos, con uno de ellos, su mellizo, vive en la residencia universitaria, los primeros en buscar a Pablo. Según cuenta el citado diario llamaron a su teléfono y al otro lado respondió un hombre, un guardia civil, que fue quien halló el teléfono en la orilla del río.
Pablo Sierra es de complexión atlética, mide 1,75 es moreno y de ojos marrones. En el momento de su desaparición llevaba camisa azul, pantalón vaquero, chaqueta azul y zapatillas blancas.
La Policía Nacional se ha hecho cargo de una investigación de la que no dan muchas pistas para no entorpecer el trabajo. No obstante, pide colaboración ciudadana por si alguien ha visto a Pablo en estos días.
No se descarta ninguna hipótesis, tampoco la desaparición vountaria. Aunque Pablo Sierra no encaja en este perfil.