"Su páncreas se caía a pedazos"

Dos operaciones fueron necesarias para salvar la vida de la joven después de que el alcohol destrozase su cuerpo. La joven llegó a desarrollar una pancreatitis aguda grave, según ha informado el médico al diario británico Daily Mail.

"Se está recuperando del excesivo abuso de alcohol que llevaba bebiendose 400 unidades de sidra a la semana", informó el médico. Esta adolescente bebía 29 veces más del límite del consumo dañino para el cuerpo. Cada botella le costaba algo menos de dos euros y medio.

La enfermedad de la niña no se había dado hasta ahora en nadie tan joven ya que está relacionada con el consumo de alcohol durante un período largo de tiempo.

Dr. Moriarty, portavoz de la Sociedad Británica de Gastroenterología, afirmó que la joven bebía unas 54 botellitas de alcohol al día, mientras que la cantidad recomendada, no supera las 14 a la semana. Su páncreas estaba literalmente envenenado por el alcohol según han confirmado los facultativos que la han tratado.

Esta noticia ha caído como un jarro de agua fría en el gobierno británico que se plantea tomar medidas para prohibir la venta de alcohol a los más jóvenes.