Investigan si el dirigente juvenil del PSOE de Elche pudo abusar de una niña de dos años
Mientras Alejandro Díaz presentaba la campaña un juguete una sonrisa, la policía le vigilaba en internet camuflada, desde hace un año, en una red de pedófilos que intercambiaban videos, mensajería instantánea y Skype con imágenes durísimas de niños y bebés agredidos sexualmente. La dureza de las imágenes les obligaba a retirar la vista continuamente. “Era insoportable” explican los policías. A pesar de su preparación psicológica, los agentes lo pasaron muy mal revisando todo el material que los pedófilos estaban haciendo circular en la internet profundo. Uno de esos pedófilos era el dirigente juvenil del PSOE de Elche. Cuando decidieron detenerlo en su casa se toparon con la sorpresa de que podían estar ante un presunto pederasta. Hicieron fotografías de las habitaciones de la vivienda para compararlas con las estancias que veían en otros videos que Alejandro guardaba celosamente. Así, dice la policía, encontraron material del presunto abuso sexual de una niña de dos años. Siguen buscando otras pruebas porque el presunto pederasta se jactaba en la Internet de abusar de otro pequeño de seis. Lo hacía camuflado con diferentes nombres en numerosas cuentas y perfiles. La juez de guardia que recibió la detención lo envió a la cárcel por distribuir imágenes de una gravedad extrema, pero de momento no ha tomado decisión sobre el material que podría haber producido el político ni lo hará ella porque se ha inhibido a favor del juzgado que llevaba la investigación desde hace 12 meses. La detención de Alejandro Díaz se produjo en casa de sus padres, que sufrieron un gran impacto emocional. Es una familia muy conservadora que lo metió a monaguillo cuando era un niño. Ahora estaba matriculado todavía en la Universidad a pesar de sus 27 años. Dedicaba el tiempo a su labor como director del consejo de la juventud y desde hace poco secretario de las juventudes del partido socialista. El PSOE le expulsó tras su detención.