La policía investiga el entorno próximo de la adolescente asesinada en Madrid
Es la hermana de Lisbet Altagracia, que llega a la vivienda totalmente abatida. El asesino de Lisbet se llevó su teléfono móvil porque podría haber una llamada o mensaje comprometido que lo situara en la casa. Investigan a un joven con el que estaba saliendo. La puerta no estaba forzada y eso refuerza la hipótesis policial. Aun así también contemplan la posibilidad de que fueran al menos dos jóvenes los que salieran de la vivienda tras el suceso como ha explicado una testigo. Supuestamente Lisbet estaba en casa sola, castigada por salir de fiesta y no cumplir el horario. Según la autopsia recibió varios golpes en la cabeza y en la cara. El asesino la dejó sin ropa tumbada en la cama. En la vivienda hay un hombre de 44 años que tiene una habitación alquilada y que llegó poco después, según su declaración. No se percató de que Lisbet estaba muerta hasta que llegaron los padres de la adolescente. Fue la madre quién la encontró. En el colegio de Lisbet hoy los policías tutores de Policía Municipal y el Samur han atendido a sus compañeros menores de edad.