El deshielo por ascenso térmico se sumará a las precipitaciones acumuladas y puede ocasionar desbordamientos en el Ebro

La portavoz de la AEMET, Ana Casals, ha explicado a Europa Press que en los próximos días del fin de semana no se esperan lluvias "tan intensas" como las de las últimas jornadas en la zona del alto Ebro, pero sí se prevé que suban las temperaturas y la cota de nieve, lo que conlleva un deshielo "lento".

Respecto a los niveles elevados de agua en la cuenca del Ebro, ha indicado que en las zona, sobre todo en áreas de montaña hay acumulada bastante nieve y además, los últimos días y horas ha llovido de manera "abundante", sobre todo en Álava o Navarra. Igualmente se han recogido cantidades "importantes" en el sistema Central.

De hecho, ha destacado que en las últimas horas se han acumulado más de 100 litros por metro cuadrado en diferentes estaciones, como en Berástegui (Guipúzcoa) donde se han recogido 138 litros por metro cuadrado; en Areso (Navarra), 95 litros por metro cuadrado o los 84 litros por metro cuadrado de Rentería (Guipúzcoa).

Sin embargo, a pesar de las abundantes precipitaciones que se han recogido en la mayor parte del país en lo que va de 2018, ha apuntado que todavía no se puede dar por concluida la sequía, puesto que aún faltan por llenarse acuíferos y porque con las precipitaciones acumuladas la predicción de vigilancia de la sequía para dentro de dos años, da un volumen de agua inferior al nivel normal en la mayor parte del país.

Finalmente, de cara a los próximos días, ha apuntado que el fin de semana las cantidades de precipitación serán menores, ya que se espera una "tregua" estos dos días hasta que el domingo por la tarde llegue un nuevo frente que dejará precipitaciones ese día y el lunes en buena parte de la Península. Tras ella llegarán unos días de estabilidad, con tiempo soleado y ascenso de temperaturas, pero de cara al siguiente fin de semana, el del 21 y 22 de abril, la predicción apunta que de nuevo regresará la lluvia.