El público del rally de A Coruña estaba situado en la zona más segura

Sobre el papel era uno de los tramos más seguros pero el horror golpeó este lugar cuando el piloto perdió el control. Los coches llegaban hasta ahí en bajada a unos 100 kilómetros por hora, al ser un giro a derechas los comisarios aseguraron bien esa zona, a priori la más peligrosa, pero el vehículo se salió por el margen derecho, teóricamente el más seguro, donde estaban los espectadores. Las medidas de seguridad dependen de la federación que organice el rally. La española marca que el delegado debe rotular y precintar las curvas más peligrosas, donde queda prohibida la presencia de espectadores. Pero los rallys regionales tienen cada uno su propia normativa. Los expertos también recuerdan que este es un deporte de riesgo y que el espectador nunca está exento de peligro al 100% aunque se cumpla la normativa.