Las riadas atrapan en sus casas a 100.000 personas en el sur de Tailandia

Fuentes oficiales informaron hoy de que el 80 por ciento de la ciudad de Hat Yai en la provincia de Songkhla está inundada, y al menos 30.000 familias no pueden salir de sus casas.

El alcalde de Hat Yai, Prai Pattano, señaló que en algunas zonas de la localidad el agua llega a cuatro metros de altura.

Las autoridades estiman que casi seis millones de tailandeses se han visto afectados por las inundaciones, que comenzaron el pasado 10 de enero y han sido calificadas por el primer ministro, Abhisit Vejjajiva, de "enorme calamidad".

"Estoy muy preocupado, sobre todo en Songkhla porque las carreteras están cortadas", dijo Vejjajiva durante un mensaje en televisión.

Un hospital de la misma provincia tuvo ayer que evacuar a todos sus pacientes cuando se vieron amenazados por las riadas.

Por todo el país, los aguaceros han dejado anegadas vastas áreas de 38 provincias, incluidas varias de la despensa arrocera situada en la meseta central.

Las autoridades quieren evitar a toda costa que las inundaciones lleguen a Bangkok, como sucedió en 1986 y 1991.

Como medida de precaución, los servicios de emergencia han colocado miles de sacos de arena en los puntos débiles del río Chao Praya y distribuido bombas de achique de agua por si se desborda.