Encarcelan a un sacerdote por sus reiteradas alcoholemias al volante

Durante las misas el párroco siempre se mostró fiel a los mandamientos de la Iglesia. Pero en su vida privada, Luis Fernando se apartaba de esa rectitud que se exige a los miembros del clero. También de las normas que debe cumplir todo conductor. Fue sorprendido hasta en tres ocasiones conduciendo ebrio, la última en enero. Tuvo un accidente contra el quitamiedos, pero además de haber bebido conducía sin carnet porque lo perdió en abril del año pasado. Y seguía cogiendo el coche. Dos meses después, en junio, otra vez lo pillaron ebrio y sin carnet. Al ser reincidente no ha podido evitar la pena de prisión: 6 meses y 20 días. Los feligreses están sorprendidos con la noticia, aunque algunos intenten quitarle hierro al asunto. La diócesis de Teruel ha condenado estos hechos que ha calificado como graves. El obispado ha apartado de sus funciones al cura de nacionalidad colombiana mientras investiga lo sucedido.