González-Sinde: "Me sentía que estaba en una guerra fundamentalista"

Siete meses después de dejar su cargo en el Ministerio de Cultura, tras la victoria del PP en las elecciones del pasado mes de noviembre, Ángeles González-Sinde ha revelado todo el proceso llevado a cabo para la elaboración de la ya famosa ley que lleva su nombre contra las descargas de Internet.

En la entrevista, concedida a Jot Town, Sinde asegura que el proyecto de la Ley de Economía Sostenible comenzó a hablarse en agosto de 2009 que iba a suponer "la renovación de muchos sectores de futuro para España".

"Si había un sector que necesitaba reformas y ponerse al día era el de los contenidos en la Red", ha asegurado Sinde.

En un primer momento se consultó a Redtel, representante de las compañías de telecomunicaciones de España, y la Coalición de Creadores, compuesta por miembros de discográficas, productores, distribuidores y creadores, entre otros, pero Sinde ha asegurado que desde un primer momento siempre hubo falta de entendimiento y que prefirieron que fuera el Gobierno quien regulara la situación.

"No llegan nunca a un acuerdo, prefieren que sea el Gobierno el que regule y así no tener que tomar ninguno la iniciativa o la responsabilidad. Los unos por no ceder en su modelo de negocio, que está anticuado y obsoleto, y los otros por no perder ni un euro de sus pingües beneficios por la venta de soportes físicos, de lectores y de dispositivos o bien de líneas telefónicas y de ADSL", ha afirmado Sinde.

El lobby de los internautas

Por otro lado, Sinde asegura que en España el tema de las descargas ilegales y de una ley que acabe con ellas ha sido muy "agresivo" en comparación con otros países, por lo que se ha sentido como una "fundamentalista" en una guerra de religiones.

"El debate siempre es agrio. Pero en otros países se ha resuelto sin el nivel de agresividad tan enorme que hay en este país, donde yo me sentía que estaba en una guerra fundamentalista. En una guerra de religiones".

Además, reconoce que no ha recibido ningún tipo de presión internacional. Sin embargo, para Sinde el lobby más grande que hay en España es el de los "supuestos internautas".

"De hecho, ese es el lobby que consigue cambiar la naturaleza de la ley y detener su desarrollo. Así que no hay lobby más potente que Víctor Domingo. Por lo que le felicito, además".

Durante la entrevista, la ex-ministra de Cultura explica que la ley Sinde no tiene nada que ver con aquello que los "lobbies de informáticos" quieren hacer ver con campañas en las que se difunde que el Gobierno quiere cerrar blogs o que va a impedir el libre intercambio de archivos personales o que pretende disfrutar de carta blanca para la censura.

Sinde ha afirmado que esto no es así "porque el ámbito de actuación de la ley es muy restrictivo y requiere de la presentación de muchas pruebas".

"El ámbito al que se limita la ley es más bien mercantil. Y la ley da además una multitud de oportunidades para que el que ha sido denunciado se defienda. En fin, el proceso no puede ser más equilibrado", ha asegurado.