Obama lleva al ciberespacio la promoción de sus medidas económicas

El evento, que la Casa Blanca había presentado como algo innovador, tuvo un aire mezclado de mitin político tradicional y examen oral universitario.

Un público de un centenar de personas -enfermeras, maestros y pequeños empresarios- siguieron en directo cómo Obama, vestido de traje azul, contestaba desde un podio en el centro del Salón Este las preguntas más populares de los internautas y que le leía el asesor económico del vicepresidente Joe Biden, Jared Bernstein, moderador del acto, desde un taburete en una esquina.

El mandatario, muy distendido durante todo el evento, bromeó incluso en una ocasión acerca de una pregunta sobre si la legalización de la marihuana serviría para estimular la maltrecha economía de Estados Unidos.

"Que esta haya sido una de las preguntas más populares no sé qué es lo que dice de la audiencia en Internet", se rió Obama, que inmediatamente contestó que "la respuesta es que no", porque no cree que "sea una buena estrategia".

Otras preguntas -algunas retransmitidas por vídeo, el resto leídas por Bernstein- tuvieron un carácter más serio, centradas en la reforma del sistema sanitario, la educación o la creación de empleo, las prioridades del presupuesto de 3,6 billones de dólares que Obama lucha para que le apruebe el Congreso.

Así, el presidente consideró "insostenible" el actual modelo de negocio de las grandes empresas automovilísticas estadounidenses. pero indicó que es necesario rescatar ese sector por su impacto en la economía general del país.

Aun así, es necesario acometer una profunda reestructuración, pues "no estoy dispuesto a despilfarrar el dinero de los contribuyentes", matizó.

Obama, que comenzó su intervención con un pequeño discurso, defendió sus medidas económicas, en particular su propuesta presupuestaria, y aseguró que las inversiones que prevé en áreas como las energías renovables crearán empleos de buena calidad.

El evento concluyó con una sesión de preguntas y respuestas con el público presente.

Entonces se produjo uno de los momentos más emotivos del acto, cuando Obama, en respuesta a la pregunta de una enfermera, reveló que su hija Sasha, de siete años, había padecido meningitis a los tres meses y las enfermeras del hospital habían sido exquisitas en el cuidado de la pequeña.

Según la Casa Blanca, el evento fue seguido a través de Internet por unas 67.000 personas.

Además, fue transmitido en directo por varias cadenas de televisión por cable.

La Casa Blanca había abierto un apartado de su página de Internet, Whitehouse.gov, para que desde el martes y hasta hoy a las 13.00 GMT el público planteara sus preguntas al gobernante.

Los internautas también podían votar cuáles eran sus preferidas entre las ya formuladas.

Cuando se cerró el plazo se habían colgado más de 100.000 preguntas, informó la Casa Blanca, que aseguró que este formato se repetirá en el futuro para que el jefe de Estado responda a las preguntas de los votantes online sobre otros asuntos.

El experimento de hoy forma parte de una campaña de Obama para explicar sus medidas económicas directamente al público, tras las críticas emitidas por los legisladores de la oposición republicana y algunos demócratas moderados, que temen el impacto que sus propuestas puedan tener en el abultado déficit fiscal del país.

El martes Obama ofreció una rueda de prensa televisada en horario de máxima audiencia, en la que también hizo hincapié en la economía y en las bondades del presupuesto que ha presentado al Congreso.

Durante su campaña electoral, Obama -un enamorado de las nuevas tecnologías- utilizó Internet como una herramienta habitual de trabajo, que le permitió enviar directamente mensajes a los votantes y crear una red de contactos que jugó un importante papel en el desarrollo de los comicios.