Nada sobre un charco de barro con su mejor estilo por una buena razón

Harto de la situación con la que tienen que lidiar cada vez que las lluvias llegan a la región, un hombre residente en Kecel, Hungría, ha querido denunciar, de una forma como mínimo curiosa, el mal estado en el que se encuentran las carreteras del vecindario.

Para llamar la atención de las distintas instituciones gubernamentales y reclamar ayuda, su idea fue aprovechar precisamente un día de lluvia para salir a la calle situada inmediatamente junto a las viviendas y lanzarse en plancha sobre un charco de barro. Vestido con un bañador ‘slip’, gorro y unas llamativas gafas de buzo amarillas, no dudó en desprenderse del albornoz y las chanclas para comenzar a realizar ‘unos largos’ de un lado a otro de la calle, de charco en charco hasta alzar los brazos y, puños en alto, rematar con un gesto triunfal entonces lleno de ironía.

Sin embargo, lo cierto es que hay parte de victoria en su ‘gesta’, grabada y difundida por Facebook, donde la publicación de Mónika Tamaskóné Markella suma casi un millón y medio de reproducciones en menos de una semana. No solo logró llamar la atención de los internautas: según informa Euronews, a los tres días de difundirse el vídeo unos obreros aparecieron en su zona y empezaron a arreglar las calles del vecindario.

No obstante, precisa el citado medio, la administración pública no dispone del dinero necesario para arreglar todas las carreteras del área, por lo que podrían tardar años en reparar todas las de la ciudad.