Rosario lo da todo: de “la silla roja es la silla eléctrica” a su instrumento frustrado

Irene ha conquistado a Rosario desde el principio, pero cuando la ha visto tocar el piano ha sido el pellizquito que le faltaba, aunque finalmente la concursante se ha decantado por irse con Antonio. Recordando su talento con el piano, Rosario ha confesado que es su instrumento frustrado: “Si a mí me hubieran dejado estudiar piano, lo que yo hubiera sido. Yo que lo toco así, sin saber nada y lo toco un poco, me hubiera encantado que me hubieran enseñado, el piano para mí hubiera sido mi gloria”. Y de Irene, que ha entrado, a Lucía, que se ha quedado a las puertas, algo que rompe el corazón a Rosario: “¡Ay, qué difícil la silla roja, que es la silla eléctrica para nosotros! Que son calambres lo que tenemos aquí. Ay, ‘omaíta’, la silla roja esta cómo es”.