¿Hasta dónde llegaría alguien por salvar lo único que tiene en el mundo? Después de que el agente de la CIA Paul Winstone (Sean Bean) fuera asesinado, su mujer Becca (Ashley Judd) y su hijo Michael, luchan por recuperar sus vidas.
Diez años después, Michael desaparece bajo circunstancias sospechosas y Becca hará todo lo que esté en su mano para recuperarle. Desde que Michael tenía ocho años y fue testigo de la muerte de su padre, Becca le ha sobreprotegido, aunque llegó un momento en el que no pudo negarse a la oportunidad que le surgió para estudiar en Roma. Sin embargo, tras unas pocas semanas fuera de casa, Michael desaparece.
Becca vuela a Italia en busca de respuestas, pero pronto tendrá que empezar a actuar por su cuenta siguiendo sus instintos. Ella y el padre asesinado de Michael eran agentes de la CIA, así que cualquiera que se haya llevado a Michael, ha dado con la madre equivocada.
Si Becca quiere encontrar a su hijo vivo, tendrá que hacer uso de toda su inventiva, aptitudes y determinación, además de confiar en viejos amigos y reabrir antiguas heridas. Pero el amor y la tenacidad de una madre en busca de su hijo no conoce límites…