"Estaba en un punto crítico y tenía que arriesgar porque no podía perder más puntos ni fallar. He fallado, el título se ha puesto muy cuesta arriba, va a ser muy difícil y el objetivo es encontrar el 'feeling' con la moto. Estamos más cerca pero todavía lejos de las Yamaha, que ganan con 20 segundos y es demasiado", manifestó en rueda de prensa.
De todos modos, aseguró que no cambiará su estrategia de carrera pese a haberse caído. "No me arrepiento, lo importante es aprender. Cuando estás en el sofá y ves la carrera ves que con ese ritmo podría ser tercero. El fallo ha venido demasiado pronto, una lástima", se sinceró.
"La sensación en las dos primeras vueltas fue buena. El problema como siempre es cuando el neumático se degrada, pero no he llegado a ese punto. Tomé riesgos, y no acabé, pero te aseguro que no es mi estilo acabar una carrera a 20 segundos de la cabeza. Será difícil por el Mundial pero intentaré encontrar el camino y el nivel en Assen para estar más cerca de las Yamaha", reiteró al respecto.
Además, aseguró que ya no tiene "nada que perder" ahora. "El objetivo es intentar llegar al nivel top tan pronto como sea posible. Quiero agradecer a mi equipo porque han estado trabajando hasta tarde en la electrónica, me sabe mal no poder agradecerlo con un buen resultado", argumentó.