Alfonso X, Gregorio XIII y Quevedo fueron contrarios a la fiesta de los toros

AGENCIA EFE 23/11/2010 12:56

En una entrevista con Efe, Juárez ha explicado hoy que durante meses ha estado recopilando todos los textos que ha podido consultar de personajes históricos, todos ellos fallecidos, que en un momento u otro de su vida se posicionaron contra la "fiesta", ya fuera por "cuestiones morales y religiosas, de sensibilidad y conciencia humana o incluso económicas".

El autor de esta obra, publicada por ediciones La tempestad, sostiene que la cuestión antitaurina "no es nada moderna y siempre ha estado acompañada por la controversia", demostrándolo con textos que van del siglo XIII hasta el siglo XX.

Asimismo, defiende en su obra la tesis de que la cuestión tanto ha provocado el rechazo de grandes pensadores provenientes de Castilla, como de reyes como Carlos III o Carlos IV, e incluso de papas como Pío V, que llegó a redactar una bula contraria a la fiesta. "No sólo tiene detractores en Cataluña, a pesar de lo que pudiera parecer por la polémica de los últimos meses", apostilla Juárez.

El libro lo abre con una referencia al historiador toledano y cronista real de los Reyes Católicos, Fernando de Pulgar (1436-1493), quien según el escritor, dejó dicho que Isabel la Católica no soportaba la fiesta y que la única vez que fue lo pasó tan mal que si hubiera podido la hubiera abolido.

Otros testimonios son las "Siete Partidas" de Alfonso X el Sabio, el epistolario de San Juan de Ávila, del siglo XVI, o el "Nuper Siquidem", del papa Sixto V.

Curioso es el texto que reproduce del agrónomo y escritor Gabriel Alonso de Herrera (1470-1539), quien en su manual "Agricultura General" se muestra contrario a la fiesta por una cuestión económica, puesto que entiende que las corridas "salen muy caras" para el erario público.

Por otra parte, se puede leer en uno de sus párrafos que en España, "matan los toros con un peligroso placer, echándoles lanzas y garrochas como si fuesen malechores, no teniendo culpa; y lo que es mayor error, hacerse en honor de santos y en sus fiestas".

Otro caso a destacar es el del escritor madrileño de ideología republicana, socialista y anticlerical, Eugenio Noel, quien atacó fuertemente el folclore español representado en el flamenquismo y las corridas de toros, que consideraba como "dos grandes males" en la vida cultural de España.

En el caso de algunos de los escritores de la generación del 98, mantiene Paulo César Juárez que los puntos de vista son muy diferentes y los hay que critican los toros por lo que suponen para las masas, mientras que Miguel de Unamuno lo relaciona con lo que denomina la doble moral española, de comprensión hacia los otros y, a la vez, de sentir placer por el dolor de los otros.

En este sentido, incluye un fragmento de "El Cristo español", del año 1909, en el que indica: "El pobre toro es también una especie de Cristo irracional, una víctima propiciatoria cuya sangre nos lava de no pocos pecados de barbarie. Y nos induce, sin embargo, a otros nuevos".

Nacido en Guadalajara (México) en 1979, Paulo César Juárez se dedica profesionalmente al periodismo y lleva dos años residiendo en Barcelona, donde también ha publicado "2012, Testamento Maya".