Los resultados obtenidos han sido "satisfactorios" y no ha habido incidencias reseñables ni intoxicaciones, según ha informado en un comunicado el Ayuntamiento.
Las inspecciones en locales permanentes se han llevado a cabo principalmente en la zona Centro y el Ensanche, aunque este año se ha ampliado la zona de las auditorias y se han añadido calles como Reyes Católicos, Simón de Anda, Avenida Gasteiz, Sancho el Sabio, Libertad, La Esperanza y Portal de Legutiano.
En cada establecimiento se ha seguido un protocolo de control en el que se han inspeccionado las cocinas, las prácticas higiénicas de manipulación, los servicios y las condiciones generales del bar. Los datos obtenidos reflejan que éstas han sido "aceptables" en todos los locales, y que incluso se ha percibido una mejoría respecto al año pasado.
No obstante, las deficiencias detectadas siguen siendo las mismas de años anteriores, como la falta de protección y refrigeración de los pinchos, los certificados de formación o la indumentaria incompleta. Las 'txosnas' han recibido visita de los inspectores los días 4, 5 y 6 de agosto.
Los controles realizados en 12 de estos locales han incidido en las condiciones higiénicas del mostrador, las zonas de manipulación, las cámaras, y en especial, las buenas prácticas de manipulación por parte del personal, así como en aspectos generales como la identificación de los alimentos.
En general, el nivel higiénico-sanitario de las mismas ha sido aceptable y no se ha detectado ninguna incidencia de especial consideración. Dentro del recinto ferial se han inspeccionado 13 establecimientos. Como única incidencia, en uno de los mesones se decomisó un chorizo con fecha de consumo preferente de septiembre del 2009.
Además, el local tenía alimentos almacenados a temperaturas incorrectas, por lo esos productos fueron retirados. Los inspectores municipales han controlado durante las fiestas la calidad de los productos que se ofrecían a la ciudadanía en los diferentes locales hosteleros.
En total se han inspeccionado 265 establecimientos permanentes, 12 txosnas y 13 locales del recinto ferial. El concejal de Salud y Consumo, Peio López de Munain, ha destacado que con los controles se ha logrado el objetivo de que "la ciudadanía disfrutase de estas fiestas con total tranquilidad, sin tener que preocuparse de lo que comían o bebían".