"Hace seis meses que nació Benjamin y hace seis meses que no puedo dormir toda una noche. Me levanto cuatro veces por noche para cambiar pañales y dar el pecho.
En los primeros tres meses, yo, Gisele, desaparecí. No me cambiaba de ropa, ni me peinaba", contó la modelo.
"Yo no soy la número uno. Mi hijo tiene ese lugar", dijo la modelo mejor pagada del mundo. La modelo, que tuvo a Benjamin con su esposo, el jugador de fútbol americano Tom Brady, reveló que tras el parto su vida sufrió una revolución.
La brasileña, aprovechó su regreso a las pasarelas en el Fashion Week de Sao Paulo, para criticar la publicación de las fotografías de los niños de las celebridades en las revistas.
Bündchen, además defendió la extensión de tres a seis meses de licencia por maternidad determinada por el gobierno brasileño y criticó habló sobre las revistas de las celebridades que apuntan a los hijos de los famosos e incluso hicieron un ranking con los bebés más "influyentes" del mundo.
"Debería haber una ley prohibiendo este tipo de abuso. Soy famosa pero mi hijo es apenas un niño y es absurdo que las personas no lo respeten. Hay gente que expone a la familia, pero lucharé con todas mis fuerzas para proteger la infancia de Benjamin", afirmó la modelo.
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