El maestro, que fue gravemente herido en el tercio superior del muslo izquierdo el pasado sábado por el quinto toro de la tarde en la plaza de Aguascalientes, ha abandonado el hospital, dijo Salvador Boix, apoderado del diestro madrileño.
"Soy consciente de que hoy estoy aquí gracias a esas manos tan oportunas que en el ruedo taponaron mi herida, al equipo médico que me atendió (...), sin ellos no me hubiera podido agarrar a la vida con la fuerza que me agarré, por supuesto a la virgen de Guadalupe" ha asegurado José Tomás.
Su recuperación tras la gravísima cornada sigue siendo para los doctores que lo tratan en el Hospital Hidalgo de Aguascalientes (centro de México) "acelerada y sorprendente", explicó el cirujano Alfredo Ruiz.
En las últimas horas, el diestro "ha dado algunos pasos con la ayuda de un andador" que irá aumentando progresivamente y lo ha tolerado "muy bien", sin grandes dolores al apoyar la pierna dañada, añadieron las fuentes.
La cornada en el tercio superior del muslo izquierdo fue de 20 centímetros de profundidad, tuvo varias trayectorias y provocó un shock hipovolémico "gravísimo" que puso en peligro la vida de José Tomás, según el parte médico.
El pitón del toro "Navegante", de la ganadería de Pepe Garfías, le seccionó la arteria femoral profunda y le laceró la arteria y la vena femoral superficiales, además de dañarle la masa muscular.