"Estamos en una situación muy diferente a la de hace 24 horas", asegura Tomás Román sobre el estado de su hijo. "He hablado con él, y está relajado y contento", afirma el padre del torero, que ha contado que la conversación con su hijo, algo desorientado, ha sido para explicarle la situación y para asegurarle que su esposa estaba al corriente de su mejoría.
"Evidentemente temí por la vida de mi hijo", afirma Tomás, "pasé unos momentos trementos, no se describirlos, pero es una situación que gracias a Dios ha pasado", relata Román, que da por perdida la lucha para convencer a su hijo de que deje los toros. "Voy a acatar lo que él diga, lo que le haga feliz", dice, "y ya sabemos qué va a elegir", añade. "En estos momentos tampoco estamos para pensar, hay que dejar que pase el tiempo y que se recupere", afirma.
Salvador Boix, el apoderado de José Tomás, ha reconocido que pasaron unos momentos angustiosos, que finalmente van camino de un final feliz. "Los médicos mostraron solvencia, profesionalidad y valentía para tomar decisiones realmente muy complicadas, y le salvaron la vida", asegura Boix.
La enferemería no estaba muy bien dotada
Boix reconoce que la enfermería no estaba muy bien dotada pero explica que "si había pinzas y gasas, lo que nos faltó fue la sangre que tardó un poquito en llegar, pero finalmente todo ha salido bien, que es de lo que se trataba y estamos contentos de que esto sea así", ha dicho en Informativos Telecinco,
Sobre los plazos para que el torero vuelva a pisar los ruedos, Boix ha explicado que es "una pregunta muy prematura", "de momento él sigue en la Unidad de Terapia Intensiva de el hospital, es ciero que la mejora ha sido espectacular y que todo está llendo muy bien", dice el apoderado del diestro, "pero tenemos que esperar, no nos hemos planteado nada al respecto, sólo nos interesa que el matador salga del hospital y a partir de ahí veremos".