En los documentos entregados al tribunal, se ha asegurado que durante un período de siete años "Levin metió a Cage en numerosas inversiones altamente especulativas en el mercado inmobiliario que tuvieron como resultado que Cage sufriera pérdidas catastróficas".
El intérprete ha insistido en que no fue hasta este año, después de despedir a Levin, que supo de "la gravedad de su situación financiera", que incluye un fraude a la hacienda estadounidense valorado en 6 millones de dólares (4 millones de euros).
Los problemas económicos de Cage contrastan con sus importantes ingresos anuales , entre junio de 2008 y junio de 2009 ganó 40 millones de dólares (26,8 millones de euros), según la revista Forbes.
El actor afirmó que Levin nunca le advirtió sobre la mala situación de sus negocios y le acusó de "prorrogar excesivamente" su línea de crédito con los bancos y las instituciones financieras.
Además, ha insistido en que Levin no le recomendó en ningún momento que dejara de invertir debido a que se estaba quedando sin dinero. Cage también buscó compensación por considerar que pagaba demasiado a Levin por sus servicios.