Ogier se hace con el triunfo por sólo dos décimas de segundo sobre Latvala

AGENCIA EFE 16/04/2011 09:04

Y es que el escandinavo realizó hoy una gran etapa final. Con un gran ritmo sobre los polvorientos caminos jordanos, pronto superó al francés Sebastien Loeb (Citroen), que comenzó segundo la etapa, y con grandes tiempos fue recortando tiempo a Ogier, hasta que al final del penúltimo tramo consiguió superarle y colocarse líder por sólo cinco décimas de segundo.

Así, en la última especial, de poco más de diez kilómetros, se esperaba una gran lucha entre los dos jóvenes pilotos, y ahí fue Ogier el que apretó todo lo que pudo, aun a riesgo de sufrir un percance. Su empuje tuvo su recompensa.

Fue el más rápido y sacó siete décimas a Latvala que le dieron la victoria. Tercero fue Loeb, seguido del finlandés Mikko Hirvonen (Ford), que consiguió el mismo tiempo en la última especial que Ogier.

El rally de Jordania acabó con el máximo de emoción posible. Si bien comenzó con la cancelación de la primera etapa ante los problemas logísticos que impidieron llegar el material de los equipos a tiempo, ha conseguido mantener un alto nivel de competición en donde se han incluido tramos con mucho espectáculo y estrategia, además del final visto.

No le ha salido bien la jugada a Latvala. En el día de ayer, Ogier se colocó líder en el ecuador de la jornada, y desde ese momento comenzó a tirar. Por detrás, Loeb y Latvala en la segunda parte del día consiguieron recortar diferencias hasta el punto de que todo indicaba que se jugarían el liderato en el último tramo.

Pero primero Loeb y después Latvala decidían frenar para evitar un liderato que supondría hoy ser el primero en salir a pista con el inconveniente que esto supone por la cantidad de polvo que hay sobre la superficie de los caminos.

Ogier no paró y siguió al máximo ritmo. Sus dos perseguidores sí lo hicieron y se colocaron a más de medio minuto.

La diferencia era aparentemente salvable, aunque no sería fácil de conseguir, por lo que la victoria quedaba en el aire. Hoy, los pronósticos se cumplieron. Ogier se vio perjudicado por su primer puesto, mientras que Loeb y Latvala comenzaron a recortar tiempo.

El heptacampeón, pasado el ecuador de la jornada decidió que el riesgo que corría para conseguir la victoria era excesivo y prefería aminorar para asegurar un tercer puesto que puede ser muy importante con vistas a la general de mundial.

Sin embargo, el finlandés seguía al máximo y tenía su premio en el penúltimo tramo. Era el más rápido y se colocaba líder con medio segundo de diferencia sobre Ogier.

Pero no todo estaba logrado, puesto que en el último tramo, televisado en directo y con un premio de puntos para los más rápidos, cambiaba de nuevo el orden de salida, y Ogier ya no sería el primero en salir, y además lo haría detrás de su rival con lo que controlaría sus parciales.

Así, después de doce tramos y más de doscientos cincuenta kilómetros de competición, la victoria se decidiría en la última especial de diez kilómetros.

Latvala no pudo mantener el ritmo tan alto, mientras que Ogier apretó todo cuanto pudo para conseguir un triunfo que finalmente se llevó por sólo dos décimas.

Por detrás, el noruego Petter Solberg (Citroen) sufrió un accidente cuando era cuarto y buscaba el podio, con lo que su plaza la tomó el finlandés Mikko Hirvonen (Ford) que abandona el puesto de colíder del mundial de pilotos.

También, tiene un gran valor el sexto puesto del finlandés Kimi Raikkonen (Citroen) y el séptimo de Federico Villagra (Ford).

Con éste, el cuarto de su palmarés, Ogier se coloca como el primer piloto que repite victoria este año, y lo hace de forma consecutiva tras Portugal, mientras que su compañero de equipo, Loeb se mantiene líder de mundial de pilotos, ahora en solitario, seguido de Hirvonen a dos puntos, y de Ogier a cinco.

La próxima cita será en Cerdeña, sobre tierra también y donde se verá el debut del equipo oficial Mini con el español Dani Sordo, como primer piloto, acompañado del británico Kris Meeke.