En un informe, la agencia indica que el abaratamiento del petróleo "pesará significativamente" sobre los resultados de las eléctricas en los próximos años, que también estarán sometidos a incertidumbre por los actuales riesgos regulatorios.
"Recientemente ya previmos un descenso en las ganancias de la industria eléctrica en 2016 debido al descenso de los precios de la energía" y a otros elementos como los desequilibrios entre el suministro y la demanda, indica la agencia.
Desde ese momento, S&P ha rebajado en varias ocasiones sus pronósticos acerca de la evolución de los precios energéticos y en la actualidad prevé que esta tendencia se mantenga en 2016 y en 2017, "con un potencial al alza muy limitado".
Este contexto eleva los riesgos sobre el beneficio de las eléctricas verticalmente integradas, debido a que los precios del carbón y del gas siguen siendo "claves" para la configuración de los precios en Europa.