El mundo mira con temor a Afganistán mientras miles de afganos tratan de huir como sea de los talibanes. Es tal la desesperación que hasta se juegan la vida subiendo a un avión del Ejército estadounidense en plena marcha. Las pistas de despegue del aeropuerto de Kabul están llenas de civiles que quieren marcharse y lo hacen con lo puesto, sin billete ni pasaporte. Al menos cinco personas han muerto en las estampidas.
Todos los vuelos están por ahora suspendidos. Estados Unidos controla el aeropuerto y el Consejo de Seguridad de la ONU se reúne hoy de urgencia. Pedirá a los talibanes que dejen salir a los civiles. Ellos celebran ya su victoria mientras los países occidentales aceleran la evacuación. España lo hará de un momento a otro, enviando dos aviones para repatriar a unas 500 personas entre diplomáticos, trabajadores de la embajada, traductores y familiares.
En nuestro España estamos ante el mayor incendio del año: más de diez mil hectáreas arrasadas en Navalacruz, en Ávila. Lo peor es que el viento vuelve a soplar fuerte durante la tarde.
Mientras, en la localidad cordobesa de Villaharta, el incendio ya está estabilizado pero la tensión ha sido máxima porque las llamas casi llegan a las casas.
Los equipos de rescate hacen todo lo posible por localizar a los miles de desparecidos tras el trágico terremoto en Haití, pero los medios son tan precarios que es casi imposible levantar tanto escombro. Por ahora, hay más de 1.200 muertos y 5.700 heridos, mientras poco a poco llega la ayuda internacional.
Toda la información, con Isabel Jiménez