Según informa Ingrid Gutiérrez, El Economista, en el Informativo Matinal el ascenso de los extremismos en el Parlamento Europeo “va a afectar a la coalición entre populares y socialdemócratas que van a tener que cambiar en algo, al menos en matices, su política económica. Según los expertos van a tener que suavizar las medidas de austeridad y endurecer la supervisión financiera y fomentar el gasto público. La presión de la extrema derecha puede llevar también a endurecer el tipo de políticas relacionadas con las barreras a la inmigración y poner más trabas a la unión económica y monetaria”.