El juzgado de instrucción 7, que instruye el 'Caso Relámpago', ha citado a la artista para declarar el próximo 18 de junio, ya que tiene vínculos profesionales con el despacho de abogados Feliu de Palma de Mallorca, una asesoría legal sobre la que pesan sospechas de estafa.
El asunto saltó cuando, durante de la investigación del caso, varios de los clientes de la asesoría Feliu acabaron como imputados. Todos ellos alegaron que eran residentes fiscales en Inglaterra y que, por tanto, no tenían obligación de declarar o pagar sus impuestos en España sobre determinadas operaciones inmobiliarias o financieras o respecto a su patrimonio.
Ese es el caso de Ana Torroja que alegó ante Hacienda que no era residente fiscal en España y al igual que el resto de clientes de la asesoría señalaba Reino Unido como su residencia.
De este modo, explica una información de 'www.levante-emv.com', recogida por las agencias, la cantante aparecía como supuesta implicada en abril de 2007, como administradora única de la empresa Carlitos Way, constituida en 2004 y dedicada a dar servicios en restaurantes.
Hacienda ha calculado una cuota presuntamente defraudada por Torroja de unos 475.000 euros en uno de los años y otra deuda de alrededor de 180.000 euros en el segundo ejercicio fiscal.
Ahora la artista tendrá que depositar, para hacer frente a las posibles responsabilidades civiles del caso, más de un millón de euros que le serán exigidos por el juzgado.
La cantante está desaparecida del mundo del espectáculo desde hace tiempo, de hecho la última vez que salió en los medios fue como consecuencia de un grave accidente de tráfico que sufrió junto a su amiga, la ex miss España Esther Arroyo. Ambas y sus respectivas parejas sufrieron heridas graves.ZA